lunes, 29 de diciembre de 2008

Valiente



Pues si, mal están las cosas, y lo que aún queda por llegar. Año tras año escucho lo de "el próximo será mejor", pero confío en un 2009 valiente, y a pesar de lo que parece: este año será mejor.


Feliz 2009

domingo, 21 de diciembre de 2008

Lo que eres para mí

Empecé por casualidad hace tiempo. Te dediqué mis sueños, mis esperanzas, mis creencias, mis valores, todos forman ahora parte de ti. Tienes tu personalidad, única, por mucho que quieran imitarte. Tienes tu cálida esencia. Tienes la sonrisa siempre puesta. Los brazos abiertos a todas horas, los  hombros dispuestos para cualquier causa. Eterna lucha contra viento y marea para quien lo necesita:

                      Todo esto eres tú, todo esto era yo.

Piedra a piedra, de dónde no había nada, con manos torpes que lo van poniendo todo en su lugar. Piedra a piedra, del conjunto de todas ellas…has salido tú.

                    Y haga lo que haga, tú siempre serás tú.

                                 Eso  siempre quedará.

No me quedan ya muchas palabras, no me queda mucho por decir. Y aunque yo no sea la misma, mis manos aturdidas siguen poniendo piedras en su lugar.

         Que quede claro, todo lo que escribo es lo que eres para mí.

                        Una parte de mí y lo que era yo.


miércoles, 17 de diciembre de 2008

Mire por donde mire

domingo, 14 de diciembre de 2008

Adjetivando simplemente


Incomoda, a disgusto, contrariada, perturbada, inquieta, molesta.

Agobiada, cansada, aburrida, impaciente, harta, obstaculizada.

Cerrada, apática, perezosa, dejada, abandonada, inapetente.

Incapaz, negada, torpe, insuficiente, falsa, débil.

Juzgada, sentenciada, insegura, incompleta, dudosa, frágil.


¿Ves? Lo sé, sé que es así. Tranquila, amiga, todo pasa.

sábado, 6 de diciembre de 2008

Cumpleaños feliz

sábado, 29 de noviembre de 2008

Mi venganza está lista

Me vengaré de la espera recreándome en cada segundo.
Me vengaré de ese tiempo pasado.
Conseguiré desafiarle y hacer como si no existiera.
Mi venganza está preparada.
Reivindicaré mi recompensa.
Buscaré sus labios con mi aliento.
Sentiré su piel rozando la mía.
Y en ese momento…
…el tiempo no existirá.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Abandono



Se sentaba enfrente del piano y acariciaba con sus dedos una dulce melodía. Conseguía con eso desconectar de todo, dejarse llevar, y sentir como nunca la música en su interior. En esos momentos sus manos a veces enérgicas, a veces suaves y a veces lentas, se confundían con las teclas. No existía nada mas, desaparecía todo. Su piano se transformaba en su amante, y le acariciaba con dulzura y cariño para oír su respiración, y cuando su pasión se encendía se desencadenaba un ritmo frenético capaz de arrancar gemidos escuchados por todos los vecinos.

Durante una época de su vida tuvo que mudarse varias veces. La primera vez el piano se fue con ella. Eran inseparables. La segunda vez estuvieron un tiempo separados, pero duró poco. Necesitaron reencontrarse, verse de nuevo cada día. Las primeras noches después del reencuentro se seducían mutuamente marcados por la huella de la distancia. Lentamente el tiempo, el trabajo, y quizá algo mas hizo que no se buscaran tanto, sus momentos mágicos se fueron espaciando. Estaban juntos. Ella sabía que él estaba a su lado, que siempre que ella quisiera estaría dispuesto a dejar reposar sus manos encima de él. Le fue abandonando, mientras él esperaba el momento en que ella se acercara para conseguir aislarla del mundo entero, unirse los dos.
En su tercer traslado tuvo que tomar la decisión de qué hacer con su piano. Pensó que lo mejor, debido a la falta de espacio y las pocas noches dedicadas, seria venderlo. Le costó hacer el paso. Dudó mucho y lloró. Pero al final lo hizo….lo vendió.

Ahora, con el tiempo le echa de menos.
Ahora, con el tiempo piensa que se equivocó.

martes, 25 de noviembre de 2008

Sigue escaseando

A veces deberíamos conocer al que tenemos delante, a ese que llamamos amigo, pareja o pariente, a ese que decimos querer. Saber cómo es, cómo piensa, cómo siente, qué hace y qué le mueve a hacerlo, qué necesita y cómo y cuando lo necesita, y aunque no estemos de acuerdo, no lo veamos igual, simplemente respetar. Veo que sigue siendo difícil, pero amiga, yo he comprobado que aún escaseando, este completo existe.



miércoles, 19 de noviembre de 2008

Lazos sanguíneos


Se había despertado el sentimiento y se había perfilado. Amanecía algo diferente dentro de ella. Ese día lo entendió. Ese día entendió el sentimiento de querer ver su propia sangre en alguien cercano. Hasta hacía poco los lazos sanguíneos no le parecían tan importantes, solo los afectivos, los del día a día. Pero de golpe, al poner su mano en la prominente y movediza barriga de una amiga, se dio cuenta de que no existía ningún vínculo de sangre en su vida.

Quiso pinchar su dedo, hacer su mezcla de sangre con alguien.

Quiso ser niña y permitirse ese juego dónde los amigos se hacen hermanos de sangre.

Quiso poder mirar a alguien y saber que sus genes corrían mezclados.




pd. aprovecho el post: felicidades "hermana"

lunes, 10 de noviembre de 2008

Realidades, sueños o deseos


Se despertó apenas un par de horas después de dormirse. Se despertó sobresaltada. Su cuerpo estaba calado en sudor frio, y sus ojos mojados. Había llorado en sueños. Soñaba con mezclas de realidades. Ya no sabía que era un recuerdo y que era una pesadilla. Vio a ese hombre pidiéndole morir en una cama aparentemente cómoda, siendo en realidad un lecho de muerte. Esa boca llena de llagas respirando gotas de su último aliento. Esos ojos agotados de intentar hacer un esfuerzo para abrirse. Vio gente que no quería ver, que en esos momentos se atrevían a juzgar un sufrimiento sin conocerlo. Y ella, levantándose, sin dejar de humedecer los labios de ese hombre sediento, los despreciaba, los echaba, los ponía en su lugar.

Se despertó con su corazón bombeando preocupación. Tuvo que serenarse. Nada de eso tenía que ver con lo que tenía a su alrededor, tan solo había sido un sueño. Nada. Nada tenía que ver. Eso no se podía repetir, para nadie. Recordó que…. tan solo había sido un sueño. Y aunque le costó, se volvió a dormir. Esta vez para correr en pijama por la calle, para ir de casa en casa gritando que todo iría bien. Creía a ciegas que ella podía encargarse de que fuera así. Repetía obsesivamente “No os preocupéis, todo irá bien”. Daba igual que se rieran de ella, que pensaran que estaba loca, que no la comprendieran, que la encerraran… daba igual todo. En realidad daba igual porqué todo volvía a ser un sueño.

Se despertó con su respiración agitada. Se despertó para convencerse de que por mucho que soñara, por mucho que quisiera evitar cualquier tipo de sufrimiento, por pequeño que fuera, ella nada podía hacer.

Pasó el día, aparentemente como cualquier otro, pero al llegar la noche seguía intentando convencerse de que ella nada podía hacer. Se resistía, eso no podía ser.

viernes, 7 de noviembre de 2008

La Propuesta


Hacía tiempo que había una idea rondando en mi cabeza. Cuando hacia su acto de presencia, me parecía un tanto descabellada, pero me sacaba esa sonrisa de conocerme a mí misma. Soy así, culo inquieto.

En una cena informal, divertida y sorprendente a la vez, salió en forma de broma. Esas bromas que dan en el clavo. Mi cerebrito se puso en marcha, cautamente… no le gusta levantar polvo a la descarada.

Y una semana más tarde...me encuentro otra vez hablando del tema y en serio. Muy en serio.

Podría decir que quizá me lo esperaba, o quizá no.
Podría decir que la vida y la gente no dejan de sorprenderme.
Podría decir que es un deseo.
Pero solo diré, por ahora, que no puedo dejar de sonreír.

Hay propuestas encima de la mesa.
Posibilidad de cambios.
Extrema confianza.
Experiencia.
Calma.
Tiempo.
Me gusta la idea.
Sí, me gusta mucho la idea.
Solo eso, ya vale la pena.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Todo lo que necesito hoy



Después de tantos meses,
el resto hoy no me importa.

martes, 28 de octubre de 2008

Vida en borrador

Sentada en el suelo como una niña, con la luz del fuego de la chimenea en su cara, revuelve en su historia. La leña incandescente resalta un rostro curtido con huellas de los años pasados. Aún así, sigue siendo bella. Escucha el crujir de la madera en medio de un silencio respetado. Su mirada sigue viva, su porte sereno y amable. Ha alcanzado lo que quería. Le costó, pero lo consiguió.

Ahora, sentada en el suelo a su edad, conmemora tiempos infantiles. Siempre le gustó sentir el calor cerca, muy cerca. Su padre solía decirle que un día se le quemarían sus largas y espesas pestañas de tanto arrimarse y mirar. Entonces ella movía un poco el trasero, como quien quiere ser precavido, echándose un poco para atrás. Pero al segundo volvía a estar pegada a la chimenea, no lo podía evitar.

Sigue sentada en el suelo y mientras los minutos marcan su paso vuelve a la realidad. Mira la llama ardiente como serpentea entre troncos. No le sorprende, está acostumbrada a la maravilla de tal espectáculo. Ella solo necesita formar parte de este juego, alimentando el ardor. El suyo y el del fuego. Apresa una a una esas cartas que dormitan a su lado, esas cartas que narran su historia (la pasada, no la que aun le pertenece), las mismas que la incitaron al insomnio, y con solemnidad las entrega al que tiene enfrente, a su aliado. Prenden con rapidez. Sonríe estoicamente.






Sentada en el suelo como una niña, a pesar de saber que ya son sus últimos días, tiene una certeza: consiguió reescribir su historia. El primer guión, el que arde ahora, se quedó simplemente en borrador.

domingo, 26 de octubre de 2008

Dedicatoria

Para la chica que habla suave y con calma pero con pasión.


Porqué las palabras nunca dejen de sorprenderme y
porqué los regalos pueden ser múltiples
incluso en ignorancia a los ojos del que regala.

martes, 21 de octubre de 2008

Sin más palabras


Incredulidad, sorpresa, nerviosismo, ilusión, ganas…
risas, besos, abrazos, caricias…


Felicidad, completa felicidad.

Así pasé mi cumpleaños.

Gracias

lunes, 13 de octubre de 2008

Te fuiste con el sol



Te fuiste buscando el sol de un atardecer

Y en ese momento enmudeciste

Callé y callamos todos por falta de palabras

Pero hoy quiero recordarte

Quiero enseñarte dónde estás

Me dijiste en el último café

“me gustaría mucho hablar más con vos”

Y sin darme cuenta ahora me escuchas cada día

Sé que es absurdo lo que digo

Que no eres tu el que está ahí

Pero eso no me importa

Solo sé que por un detalle

Ahora hacemos lo que la vida rompió.

No hace mucho me preguntó un niño

“¿porqué les has puesto gafas al sol?”

Y sin esperar respuesta, el mismo contestó

“seguro que por lo mucho que brilla

…. puede que cause dolor”

Para ti, Bruno, en mi entrada número 100.

viernes, 10 de octubre de 2008

Duendecillos

Me despiertan esos duendecillos
sacados de las más dulces soñadas tinieblas,
se apoderan de mi cuerpo
y provocan el desastre reconocido
aporrean a izquierda y a derecha,
bajo la cabeza y hago el intento de ampararme
y en un instante atrevido puedo ver sus sarcásticas sonrisas.
Que alguien berree himnos victoriosos y de valor
que alguien sustente la gracia del guerrero,
del que delibera en la locura del vivir y medita su dolor.


***


A veces pienso desoladamente
Que es en la vida misma
Es en su limpia página
Donde se me derrama el borrón de la muerte
Pero miro allá abajo
Donde luce el frescor recién vertido
En el cuenco frugal de la mañana
A los perros nerviosamente alegres
Que en mi lugar y en nombre mío
Retozan entre sí
Tan exhibicionistamente vivos
Y sé que hay todavía cosas
Que hay que aprender a poner en su sitio.

21 sep 08 - Tomás Segovia

martes, 7 de octubre de 2008

De protagonistas

Veo en mi entorno familias completas en las que cada uno mira por su bien, en las que se pretende que los hijos se adapten a los horarios, deseos, expectativas o aficiones de los adultos. Y en el caso de que el niño manifieste su desacuerdo de alguna manera, se rebelan con un “porque me hace esto a mí, con lo que yo hago por él” en lugar de intentar entender que quizá es el adulto quien tiene la capacidad (en teoría) de comprender las necesidades del menor, y poder adaptarse a él.

Me harto del “lo que tienes que hacer es…” (de adultos a niños, o de adultos a adultos, da igual, existe en todas las modalidades), indicando que aquello que haces, tus decisiones, o como las llevas a cabo son totalmente equivocadas. Me cansa el sabelotodo, el que está de vuelta de la vida, y el que cree que siempre tiene la razón. El que no escucha, y el que se pisa al hablar a sí mismo, y que además como necesita escucharse por encima de todo grita más a ver si se oye.


En una sociedad que se mueve en el yo más intrínseco, en el que el protagonista de nuestras vidas es el individualismo, junto con un papel secundario del egocentrismo, me emociona cualquier gesto de generosidad, de empatía, apoyo y reconocimiento de los personajes que normalmente actúan como “bulto” en esta película que es la vida. Pues nada, que sepáis que he decidido que en la mía pasáis a tener el papel principal.

domingo, 5 de octubre de 2008

Acto de valor

Recibió la llamada habitual de su madre, la de “sé que estás enferma, ¿quieres que vaya?”. Era un domingo, y Abril llevaba muchas horas en la cama, era lo que necesitaba. Esa llamada se convirtió en algo que muchas veces había deseado, pero que no creía que nunca llegara.


Unos días antes, un programa en la televisión había incitado y maquinado esa conversación.

M: ¿viste el programa del otro día que hablaban de las adopciones?

A: me avisó S. por mensaje, pero lo pillé cuando terminaba, me han dicho que fue muy interesante.

M: me hubiera gustado verlo con mis 2 hijos al lado y poder contaros todo lo que quisierais. Aunque en tu caso sé muy poco. Fueron situaciones muy distintas.
(….)

Tú eres toda una “señorita”, no te ves Abril. Tu madre estuvo tiempo carteándose con la madre Alicia, se preocupó mucho por ti. Sé que era alguien muy educado, culta, que escribía muy bien, por sus cartas que eran todo sentimiento y preocupación. Sé que era de la Sierra. Su parto tuvo más complicaciones por la incompatibilidad de vuestros grupos sanguíneos. Pero todo lo que yo sé creo que ya lo sabes tú. Pero solo tienes que preguntar, no quiero que eso sea un tabú, sabes que tu padre y yo creíamos en las palabras, y yo sigo creyendo.

A: ¿sabes de qué pueblo era?

M: no, hija, no puedo ayudarte en eso, no sé ni su nombre, a diferencia de la madre de tu hermano.

A: mamá, ha sido complicado llevar esto todos estos años?

(….)

Hubo momentos muy difíciles, tú carácter hacía que llegaras a casa y dijeras lo que te preocupaba, tu siempre has sido más inquieta y muy expresiva, pero tu hermano……Tu hermano llegaba a casa casi cada día con moratones, hasta que un día me dijo “mamá porqué has dicho que soy adoptado”. Y yo preocupada le expliqué tan bien como pude, que me preocupaba tanto que estuvierais bien, que cada año hablaba con vuestras profesoras y les contaba vuestra situación. Ellas no le daban importancia, pero yo sabía que si la tenia, y que tenían que tenerlo en cuenta. La voz en esta ciudad vuela a pasos agigantados, y la información puede ser muy buena pero a veces también puede ser muy mala. Todo depende de quién la use.

(….)

Casi una hora de teléfono puede dar lugar a mucha confesión. Hechos que apenas se sabían o se recordaban. El esfuerzo, mezclado con la emoción y el llanto, indicaban lo que significaba ese momento para su madre. Había sido valiente hablándole de sus batallas, ahora le tocaba a Abril serlo, se sentía en deuda con ella.

jueves, 2 de octubre de 2008

Mente amnésica

Llevaba un tiempo quejándose de falta de memoria. No recordaba cosas importantes, cuando siempre había sido una de sus virtudes. No entendía como podía olvidarse de cosas que le interesaban, nombres de libros, de personas, incluso de gente cercana. Se daba cuenta de su mente amnésica, así que se esforzaba. Intentaba prestar más atención a todo y repetía los nombres en su interior para que se le quedaran. Pero no lo conseguía, al día siguiente o al cabo de un instante no recordaba aquello en lo que había puesto todo su empeño. Quería pensar que tenía demasiadas cosas en la cabeza, mucho trabajo y cosas a resolver. Cansancio…era eso, o quizá exceso de información. También se daba cuenta de la facilidad en la que se quedaba ausente, desconectaba mientras le hablaban. Antes se recreaba escuchando al otro, y disfrutaba en ello. Ahora eso había cambiado. Y cuando por fin llegaban los deseados fines de semana, al final resultaba que solo quería pasar el máximo tiempo posible en la cama y dormir. Sabía que eso no era del todo normal. Pasó el tiempo, hasta que un día de forma brusca se lo dijeron:


“Tienes una enfermedad”

“¿una enfermedad?”

“Ya basta, no lo escondas más, tú sabes en el fondo que algo en tu organismo no funciona. Y hace tiempo”

“Es el cansancio”

“No, no es eso. No es grave, pero te tienes que sacar eso que llevas dentro. Cuanto más tardes en aceptar lo que te acompaña, más grande va a ser, y más vas a tardar en sacártelo de tus entrañas. Hazlo antes de que sea demasiado tarde.”


Y esa noche en su casa, abrió una botella de cava y una libreta para escribir sus memorias.

martes, 30 de septiembre de 2008

Se acaba el tiempo

Viene a por mí, parece que está lejos, pero no es así. No quiero pensarlo, no quiero sentirlo, pero está ahí, a la vuelta de la esquina. El tiempo se acorta, el tiempo me atrapa. Y yo, tonta de mí, sigo pensando que aprendo mientras tropiezo con la misma piedra, la de ayer, la de hace unos años, la de siempre. El tiempo….hay momentos que hasta esto tiene final.

Hoy dejaremos que las sonrisas se aparten, para dejar paso a las barbaridades que se me ocurran. Se acaba el tiempo de la serenidad, y por qué no, también de la cordura. En este momento siento con mucha pena, que se acabó.


martes, 23 de septiembre de 2008

Cantando victoria


P.: hijo estoy orgulloso de ti, tu profesora me ha dicho que has empezado muy bien el curso.

A.: ei, un momento, no cantemos victoria que aún queda todo el curso por delante.

domingo, 21 de septiembre de 2008

De tiempos importantes

Estamos en periodo de sentar bases, aquellas que deben ser sólidas, fuertes y claras. En las que todo se debe poner encima de la mesa para conseguir adaptarlo todo bien, con naturalidad, ilusión, comprensión y cariño.

Esas son las cuatro patas de una mesa, a las que no se les permite más que cojear y de una en una, porque si lo hace de golpe, la mesa se hunde. Encima de la mesa aun no hay nada, pero está previsto poner cosas, de eso sirven las mesas.

Este es el momento de ponerlo todo, de tener paciencia, de saber qué es lo que hay, y lo que no. De dar un tiempo, y de adaptarnos todos a los cambios.

Estamos en periodo delicado, peligroso, en el que los miedos y el cansancio surgen de la nada y enturbia una realidad.

Este es el momento de tener cuidado para no dar marcha atrás. Precisamente por la importancia, los pasos uno a uno y no nos olvidemos de mirar adelante, recordando lo avanzado, lo que hay detrás.

Algún día en cualquier parte, en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas.


lunes, 15 de septiembre de 2008

Aparente normalidad



Todo es aparentemente normal. Te levantas y uno tras otro haces los mismos pasos de siempre: café medio dormida, ducha, vestirse, ir a trabajar… y así todo el día hasta que llega la hora de regresar. Parece que todo está igual, cuando la simple verdad dice que todo es diferente. Hay una parte que para los más observadores parece ser obvia, mientras que para otros pasa desapercibida. Algunas cosas son menos perceptibles de lo esperado, otras son solo conocidas por los privilegiados. Todo es aparentemente normal en mi vida, cuando en realidad, todo ha cambiado, porqué en definitiva lo que persiste, lo que estaba y sigue ahí… ha mejorado.

Mi voz no tiembla al hablar, mi cabeza sigue en alza, y TODO, todo esto lo digo cuando mis pies se arrastran por el barro, por las sombras, y por el frío atardecer de un final de verano.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Tengo un plan



Hoy, al volver de la estación, me he dado cuenta de que sin querer he trazado un plan. Mi asustadiza cabeza ha vuelto a levantar la mirada del suelo y ha vuelto a mirar a su alrededor. Noto que esos momentos de confesiones íntimas me cargan de energía. Hablar, decir aquello que realmente siento, por mucho que me cueste o por duro que yo lo vea, me da esas ganas de superar cualquier obstáculo que se interponga. Vamos a saltar.


Espero buenas noticias la próxima semana, y aunque no sea así, y me lo pongan aun más difícil no pararé. El lunes esto empieza en serio. Mi orgullo, te voy a dar lo mejor de mí. Utilizaré todo lo que dicen que se me da bien (para Gilda tengo un tercer ojo, será esa gran intuición). Estaré atenta. Con cuidado. Pondré entre mis manos todo lo necesario para conseguir aquello que quiero. Sé que vale la pena. Lo trataré con cariño y respeto, tal y como se merece algo tan grande, porqué realmente los que saben algo, opinan que lo es. Tendré que buscar momentos de descanso de tanta intensidad. Tú y yo sabemos lo que puedes llegar a desgastar.

No tengo mucho tiempo para perder a estas alturas, así que vamos a ello. Volvemos a empezar, y esta vez va muy en serio. Venga, mi orgullo, ayúdame a esa gran novedad.



One day I’ll find relief
I’ll be arrived and I’ll be a friend to my friends who know how to be friends

One day I’ll be at peace
I’ll be enlightened and I’ll be married with children and maybe adopt

One day I will be healed
I will gather my wounds forge the end of tragic comedy

I have been running so sweaty my whole life
Urgent for a finish line
And I have been missing the rapture this whole time
Of being forever incomplete

One day, my mind will retreat, and I’ll know god and
I’ll be constantly one with her night dusk and day
One day I’ll be secure, like the women I see on their 30th anniversaries

I have been running so sweaty my whole life
Urgent for a finish line
And I have been missing the rapture this whole time
Of being forever incomplete

Ever unfolding
Ever expanding
Ever adventurous and torturous
But never done

One day, I will speak freely
I’ll be less afraid
And measured outside of my poems and lyrics and art
One day I will be faith-filled
I’ll be trusting and spacious authentic and grounded and whole

I have been running so sweaty my whole life
Urgent for a finish line
And I have been missing the rapture this whole time
Of being forever incomplete

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Se ha ido

Tenía ya ganas de llegar a casa, y por fin a las diez estaba accediendo por la puerta. Al entrar ya noté algo raro, y al mirar alrededor vi que no estaba. Busqué en todas las habitaciones y debajo de la cama, normalmente ese era su escondite predilecto. Pero no estaba. La vi por última vez por la mañana, al irme. Las ventanas permanecían cerradas, y la puerta también. Nadie había entrado durante el día, y me pregunté ¿cómo había podido desaparecer así?

Quizá escapó al abrir la puerta, al salir a trabajar, o quizá querría permanecer a mi lado y yo ni me di cuenta y la perdí. Que más da eso ahora. Se ha ido, ya no está.

Eso me lleva a la conclusión de que falta seguridad en mi casa, y tengo que ir con más cuidado al salir.

Solo espero que si se ha ido sepa volver, cuando quiera, a su hogar.

sábado, 6 de septiembre de 2008

La curiosa Guindilla

Ella quiere saber que son esas 6 pequeñas cosas cotidianas que me hacen feliz. Difícil elección, de entre todas....seis. Pues aquí lo tienes:

Me enloquecen los abrazos pegadizos de mis sobrinos (los 2 reales y alguno postizo), el de noble y dulce corazón de 6 años, la pícara fantástica de 4, la pequeñaja de viva mirada azul Berta, y la que, después de todo y con grata sorpresa para mi, me llama Tata.

Dejarme llevar por la música que entra en mi cuerpo, en cualquier momento, en cualquier lugar, y no poder evitar bailar.

El primer sorbo de un buen vino en compañía de ELLA, mi otra mitad. Su sonrisa cómplice, reveladora de lo mucho compartido, con ese sabor áspero y potente en mi boca, son la mejor combinación existente.

El mar en invierno, otoño, primavera o verano, respirar su olor a sal, el vaivén de las olas y la paz de la brisa marina, con un cálido sol que solo pretende acariciar o con la brillante luna blanca que sirve de guía al andar.

La sensación de caerme de sueño y poder abandonarme, tranquila y conscientemente de que al día siguiente tampoco hay prisa para levantar. O también en la siesta acurrucada, con una manta en invierno, en el sofá.

Su saber escuchar, su paciencia, su pasión, su comprensión. Su ambivalente mirada iluminada clavada en mí. Sus caricias intencionadas o despistadas. Su atención. Compartir sus sueños, preocupaciones o ilusiones y lo míos. En definitiva ÉL.

….y evidentemente seguiría, pero el primer impulso ha sido este, así que esto es lo que se queda por qué esto es lo que hay….



Chicos...y Guindilla aún quiere mas, así que los nominados a hacer lo mismo son: Nima (como no, creo que ya ha empezado), Not (tengo mucha curiosidad), Carome (no podias faltar, a ver que 6 eliges), Ligeia (que sigue viva), Mas de mi que de....lirio (por recien llegada y pq me gusta su blog) y Gilda (a ver que si es capaz de resumir y solo poner 6).

viernes, 5 de septiembre de 2008

Pensando

Le dijo que cada día pensaba en ella,
que todo en su entorno se la recordaba,
que solo el dolor era el amo del olvido,
pero aún así al levantarse cada día,
seguía pensando en ella.

Y esas frases me dieron a mí que pensar….

“Quizá ELLA piense tanto en mi como yo he pensado,
pienso y pensaré en ELLA”

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Intercambio de papeles

Iba de camino a casa pensando que era el día. Esta vez lo haría en la más completa soledad. Desde que empezó la búsqueda realmente no había estado sola, pero ahora, las circunstancias, ella misma, todo se había antojado a esa soledad. No era la situación ideal, pero podía más la necesidad de hacerlo. Sí, quería hacerlo. Llegó a casa, cogió el teléfono y llamó… Primero marcó el número de la hija de Mila, quería ser cauta, avisar de su presencia, sabía que su llamada significaba para Mila lo mismo que para Abril. No contestó. Al colgar, y durante unos minutos dudó si esperar a llamar en otro momento, o marcar directamente el número de Mila. Miró unas cuantas veces los dos números que tenía delante y recordó la sensación que tenía de camino a casa “hoy es el día”. Así que volvió a marcar, la voz de Mila respondió.


-Estaba esperando tu llamada. ¿Cómo estás hija?

Abril no era su hija, y Mila no era esa madre buscada, pero al escuchar esas palabras algo se clavó en su corazón. Simplemente sintió un largo pinchazo…le dolió. Mila era la única persona que conocía Abril que había tratado con su madre, la había visto, le había hablado y la recordaba. Quería ayudarla. Querían ayudarse. Escuchando a Mila hablar de ELLA, se daba cuenta de cuánto deseaba ayudar a Mila a encontrar a su hija, que ahora tendría tres meses menos que Abril. Las dos estaban emocionadas y al despedirse Abril no pudo más y lo soltó:

-Me gustaría un día poder darte un abrazo Mila, si es posible, sería importante para mi.

-No sabes lo que me gustaría mi niña, será como dárselo a mi hija.

Y algún día, saben las dos que lo harán.

Imagen de Virginia Palomeque: http://virginiapalomeque.blogspot.com

jueves, 28 de agosto de 2008

Sin lo esencial

Llevaba días en su casa, con las puertas cerradas y sin poder salir. Lo bueno de ese hermetismo es que si no se puede salir, nada ni nadie puede entrar. Puede que de eso se tratara. Por detalles que ahora no vienen a cuento, las puertas se fueron cerrando una a una, parecía que la corriente de aire decidía que eso era lo mejor. Después fueron cerrándose las ventanas, y cualquier contacto con el exterior se volvió imposible. Ni siquiera entraba un rayo de luz valiente a observar que pasaba ahí dentro. Pero eso no le importaba, o si, pero sentía que era lo que tocaba. Era la hora…las horas. Su cuerpo en ese espacio y tiempo se iba trasformando en un ser arisco. En su cara apareció un color grisáceo, unos ojos vacíos sin rastro de su anterior luz, y unos colmillos puntiagudos crecían cada vez más. Su cuerpo había envejecido considerablemente por la falta de oxígeno, y su espalda se enroscaba. Las arrugas se asomaban de entre los desgarrados trapos que llevaba como vestimenta. Sus manos, de dedos largos y finos, de uñas largas, se habían vuelto torpes y rompían todo aquello que pretendía tocar. Sabía que lo único que le quedaba era morir. Se estaba volviendo en alguien realmente repugnante. Había intentado evitarlo, buscó soluciones, y lo único que consiguió fue romper un poco el cristal de la ventana de su habitación. Un agujero, del tamaño de su dedo meñique, permitía el paso ridículo de aire. Eso es mejor que nada, pero sabía que no era suficiente. Exhausto y resignado se tumbó en su cama a esperar. En su último suspiro solo algo de su cuerpo cambió. Sus ojos volvieron a brillar. Tocaba descansar.

martes, 26 de agosto de 2008

Volver a empezar

La echo de menos, no por sus historias, sino por lo que yo sé que hay detrás de ellas, seguro que puede encontrar el tiempo que antes le dedicaba.
¡¡Ei!!...si, a ti!! Sé que aunque disimules me escuchas.
Tómatelo con calma, siempre se puede volver a la carga.

¿Que no sabes por dónde empezar?

No hace falta mucho dormilona.... levántate y déjate llevar.


-slowly, plis.... no sea que la velocidad me tire al suelo

miércoles, 23 de julio de 2008

Así era

Llegó el día en que Abril recibiría la información deseada. Sus amigas la tenían escrita y en su memoria, no era algo fácil de olvidar. Se sentaron alrededor de una mesa. Abril estaba emocionada y nerviosa, ya des de primera hora de la mañana, en que abrió sus ojos, tenía en mente todo lo que le iban a contar. Y llegó el esperado momento. Sentada en una silla, con la cabeza ladeada apoyándose en la pared, no veía nada más que un papel. Rodeada de sus tres apoyos, no se daba cuenta de que no era la única emocionada. Y escuchó todo lo que pudo escuchar.


Esa mujer, Mila, había conocido a su progenitora, había coincidido con ELLA, y se acordaba a la perfección. Sus recuerdos permanecían intactos. Decía cerrar los ojos y poder verla. La recordaba cómo alguien diferente, por su edad, su clase, su situación, y por el trato diferenciador que recibía. Según Mila, no era cómo las demás:

ELLA, morena de pelo largo y cuidado, pasaba muchas horas encerrada en su habitación. Era la única que tenía la suya propia, y se la escuchaba llorar en soledad…..
Nunca salía de ese cuarto sin haberse arreglado. En la primera impresión parecía tener un carácter reservado y poco comunicativo, aunque en las distancias cortas ganaba mucho, y parecía ser muy maja. Provenía de una familia “bien” adinerada y con cultura, familia de buena posición social.

Un día, una joven Mila se le acercó y le preguntó directamente: “¿si tu ya eres libre, tienes edad y medios para tener a tu criatura, ¿por qué no te la quedas?”, a lo que ELLA respondió: “el padre está casado y sería una deshonra para mis padres y mis…..” (supuso Mila que hermanos, ya que ELLA no llegó a terminar la frase). Una deshonra para una familia y sus negocios.

Así que esto es lo que sucedió, o lo que se puede parecer a una verdad. ELLA no pudo quedarse con Abril presionada por un entorno. Parecía que estaba convencida de que era lo que tenía que hacer, lo que representaba y asumía en silencio su decisión, sufrida decisión. Abril al escuchar el sufrimiento de su madre, cómo el de muchas madres, no lo pudo soportar. Alzó la mano y con un “basta” notó que le faltaba aire para respirar. Se levantó y se fue a otro espacio, sola se volvió a sentar. Cómo su madre, en su espacio, en soledad, necesitaba llorar.

Ahora no solo Mila podía cerrar los ojos y verla, la también reservada Abril podía cerrar los ojos o mirar un espejo y tener la sensación de conocerla.

Abril tardó semanas en poder escribir ese momento, y aún en su soledad llora desconsoladamente sin saber muy bien porqué. Se siente contenta con lo que ha tenido, con lo que tiene y con lo que puede tener. Se siente con fuerza para seguir, y ha descubierto en este camino el valor del amor y la amistad.

Abril sigue llorando, no sabe si esto será lo último que escriba de este camino, por lo mucho que le ha costado; pero aunque fuera así sabe que el camino no ha terminado.

Nota: gracias Mila, quizá algún día puedas leer esto, pronto nos encontraremos.
(Mila no es el nombre real, y el de mi madre me lo guardo para mi)

jueves, 17 de julio de 2008

¿Sugerencia?


Siento como si no tuviera sentido seguir escribiendo. Tengo ilusiones, y pasos por contar, pero es como si se hubiera roto mi espacio en mil pedazos y no consigo volverlo a recuperar.

Quizás estoy demasiado cansada, y no tengo el tiempo suficiente para dedicarle. Quizá pienso, que ya da igual y eso es poco alentador.

Me gustaría poder entregar más capítulos de mi vida, pero cuando empiezo no escribo más de dos palabras, y van pasando los días y cada vez me cuesta más.

No sé si esto es definitivo, o solo temporal, y me entristece enormemente abandonar algo tan íntimo y personal.

He probado varias opciones, la sensación de abandono sigue igual.

¿Alguna sugerencia para recuperar lo que siempre ha sido esto?

domingo, 13 de julio de 2008

Un alto en el camino

Hacía dos días Abril había recibido la información esperada. Mientras aún la asumía, necesitaba hacer un alto en el camino, y reencontrarse con su suelo firme, el que si tenía. Y en ese día especial, lo encontró:

“Era un 13 de julio. Era hace 5 años, y pasarán muchos más. Pero siempre recordaré ese 13 de julio, en el que te fuiste. No creas que todo esto forma parte de una idealización, te echo de menos tal y como eras. Con ese carácter fuerte y pasional. Con ese mal humor infernal. Siempre recordaré tus manos grandes, las mismas que me acariciaban y me protegían, que eran capaces de dar un golpe en una puerta y dejar ahí tu huella. Parecías distante, altivo. Inspirabas respeto a todos, pero en cuanto alguien se acercaba un poco más, era inevitable ver un corazón dulce y tierno. Me enseñaste a luchar, a creer en mí, y lo que era un amor incondicional. Aprendí lo que es la valentía, cuando te observaba desde lejos, en el transcurso de tu enfermedad. Aprendí contigo a responsabilizarme de mis actos. Y ahora, con el tiempo, veo que en lo que me decías tenías razón: buscaré lo mejor.

Todos te echamos de menos, aunque en casa no se diga yo lo sé.

Vosotros, los dos, no tuvisteis un camino fácil. Teníais miedo de no ser unos buenos padres, supongo que como la mayoría. Vuestro deseo tuvo muchas barreras a superar. Os sentías diferentes por tener que asumir vuestra imposibilidad natural. Paseasteis cogidos de la mano por pasillos de angustia, y bosques de terrores infantiles. Y cuando por fin lo conseguisteis, os entregasteis siendo tal y como sois. Formasteis un buen equipo. Con vuestras diferencias complementarias, con mis normales desacuerdos, me disteis lo mejor que me pudisteis dar. Y entre todo un buen modelo, el vuestro. Lo que quiero para mí.”

Aunque ELLA, su madre, se hacía cada vez más cercana. Aunque ELLA ya tenía un nombre propio, Abril tenía presente constantemente qué había tenido y lo que había vivido.

jueves, 3 de julio de 2008

La primera carta




Sabía que sus amigas tenían información, pero habían pactado hablarlo en el momento que Abril considerara adecuado, y le darían aquello que ella precisara. Durante esos días después al mensaje, la inquieta y revoltosa Abril estaba pactando con ella misma, con su impulsividad, su curiosidad, con su frágil serenidad. Se había preguntado si quería saberlo todo, si estaba preparada para ver el dolor profundo de cara, o quizá solo era la sorpresa. En todo caso, era la verdad, o al menos algo más que se pudiera parecer a lo que era la verdad, y eso era lo que ella quería: comprender, aceptar, asumir verdades dolorosas a las que toda su vida había jugado al “quiero saber, pero quizá mejor no”. Si, era mejor saber, y se preparaba para querer saberla entera, hasta el final, dónde ella considerara que era el final.


En esos días, mientras esperaba la cita en la que le iban a entregar uno de los mejores regalos de su vida, había conseguido hablarle a ELLA, esta vez, por primera vez, sí… y aquí queda publicado:

“Van llegando los momentos esperados. Van apareciendo las piezas, aunque alguna no encaje, hay muchas otras que sí. Tu seguramente no estarás preparada, quizá no querrás ver si soy un reflejo tuyo, si tengo tus ojos, tu pelo, tus gestos, tus reacciones….quizá te duela demasiado recordar. Tienes tu vida, ya la tenías entonces, cuando de forma inesperada y no deseada yo aparecí en tu vida, y tomaste tu decisión, quiero pensar que la tomaste tú, y quizá no fue así, puede que un entorno o mi padre te obligaran. Eso ahora solo es información. Sabes, en mi interior más profundo deseo tener algún rasgo tuyo para tenerte presente cada día, cuando me mire. Lo que sea que me recuerde que existes, que eres real, no el hada de ojos rasgados que dibujaba por las noches cuando contaba con solo 6 o 7 años….esos dibujos, mi gran secreto que no he contado hasta ahora. Esos dibujos que por ser inexistentes en los otros desaparecieron en mudanzas…y no sabes cómo las odio las mudanzas. Quiero saber que eres real, de tanto soñar me perdí en mi imaginación y ya no sé qué es verdad. Quiero verte en mi, para recordar siempre que exististe y con ello recordar la suerte que tuve…la suerte que me diste para darme todo lo que he tenido, y todo lo que puedo llegar a tener. La suerte por haber estado en la familia que he estado, mi familia…. si, la he tenido, una familia normal con sus luchas, pero con un amor incondicional. ¿Y tú? ¿Cómo estás tú? Seguro que has sufrido en silencio, pero no sufras más, ahora…madre…ya está. “

Después de esta primera carta sabía que escribiría más. Sólo quedaba esperar….la siguiente semana, sabría todo lo que sus amigas le podían dar.

sábado, 28 de junio de 2008

Retales de su vida




Estaba tumbada en un sofá que no era el suyo, muy cómoda y medio dormida. Eran las 5 de la tarde de un día festivo en su ciudad, ideal para una buena siesta. Solo pensaba en relajarse. Quería disfrutar de ese momento en el que te dejas llevar por la pesadez mientras van cesando los ruidos. Sin embargo un “pip”, que anunciaba la llegada de un sms, le hizo abrir un ojo. Sin más esfuerzo que el de extender un brazo, alcanzó el móvil para ver de qué se trataba. A la primera lectura no entendió nada, o no quiso entender… Se incorporó y volvió a leer. Y por fin una tercera vez la ayudó a hacer creíble lo que leía:
“ya tengo algunos retales del tejido de tu vida, solo unos cuantos, NO TODOS (…..), he hecho lo que he podido, ahora te toca a ti. Creo que hay algo de ELLA en ti, mírate sin negación y la sentirás”


El mensaje provenía de una de sus compañeras de ese agridulce viaje, una de sus necesitadas mediadoras.

Hacía ya un par de meses del mail enviado por N. a esa mujer que entre sus recuerdos, podía tener alguno de la madre de Abril. No se había obtenido respuesta alguna, así que la misma Abril pidió a G. que intentara contactar con esa mujer mediante el número que C. había encontrado. Y así se hizo….. G.llamó, G.la encontró, G.habló con ella, G. tenía novedades….y G., sin esperar a poder verla, se lo anunció…

Ahora Abril debía prepararse para decidir qué saber y qué no. Prepararse para tener la necesidad de parar la búsqueda cuando sintiera que ya tenía suficiente. Prepararse para ir tejiendo, con esos retales, el vestido de su vida.

miércoles, 25 de junio de 2008

Comprender


De su última fantasía, Abril había sacado nuevas preguntas a responderse.
De los comentarios aportados descubría mas reflexiones a enfrentarse.

Su búsqueda no se tenía que centrar en encontrar, sino en aceptar, en comprender.

Comprender una historia que durante años quiso creer que la tenía asumida y aceptada, no siendo eso del todo cierto. Si surgían todavía muchos "porqué", "que pasó", "q sintió", es que conocía perfectamente un hecho, pero no lo comprendía. Creció con una parte "oscura" en su vida, algo incierto, de lo que no sabía mucho, aunque se hablara del tema. Y más tarde, sin darse cuenta, se dejó arrastrar otra vez a la oscuridad.

Hablar abiertamente de algo no implica aceptarlo.

Y ahora que aparecían novedades era un buen momento de empezar a tener control.

jueves, 19 de junio de 2008

Fantasia de un pueblo





Por la necesidad de asumir, de tomar con calma sus propias emociones, y por descansar un poco de tanta intensidad, en el último mes Abril no había hecho muchos pasos más. Necesitaba no añadir más cargas emocionales en su vida, era peligroso, Sin embargo, pensaba cada día en todo lo que tenía pendiente…buscar, buscar, buscar…. ¿Buscar información? ¿Buscar respuestas? ¿Buscar personas? ¿Buscar su infancia? ¿Buscarse a ella misma? Buscar sus raíces….. Tenía muy presente la frase de su amiga Gilda: “si no sientes tus raíces es fácil andarse y perderse en las ramas….”. Abril era persistente, y ya lo había decidido, así que seguiría hasta llegar donde el camino iniciado la llevara. Tal decisión, ya había estado demasiado postergada por miedo.


Mientras transcurrían los días, se daba cuenta de sus reacciones, y había algo que la fascinaba….su propia imaginación. Cada vez que alguien nombraba el nombre de un lugar... “La Sierra”….se disparaba algo en su mente sin control. La voz que le hablaba se quedaba en un susurro para dejar paso a ciertas fantasías….


Por algún lugar escondido de esa Sierra habría un pueblo donde ella inventaba sentirse en su segundo hogar. Se redescubría a si misma emocionada, paseando en una calle de un pueblo antiguo, con no muchas casas de piedra. Rodeada de gente anciana, pocos niños, jugando con los perros, oliendo las flores, fotografiando los balcones, las puertas, los rincones…. Y ella allí se identificaba…. Deseaba tocar las paredes de las casas, sentir su tacto, como si con ello pudiera consolar a una madre angustiada. Como si con ello hablara con braille a alguien….da igual, quizá lo más importante era hablarse a sí misma, pero aún necesitaba comunicarse con ELLA de alguna forma…. Qué bonito es todo cuando es imaginación…


Con solo escuchar un nombre, se disparaba el querer saber…. pero Abril seguía luchando con la irracionalidad del sufrimiento, del padecimiento de cualquier información.


Cuando fantaseamos no tenemos en cuenta el dolor, solo la emoción.

martes, 17 de junio de 2008

Sabe, siente y hace que...


Impulsa protección,
inspira fragilidad,
sugiere indecisión,
muestra vulnerabilidad.

Incapaz de crear su propia defensa,
ineficaz en su rompeolas,
inexperta en construcción de murallas,
irascible y en carne viva….
.…con uñas afiladas....
….con miedos oscuros….

….se muestra al exterior.
No confia en ella y...
...a veces...
...pierde el control.

lunes, 16 de junio de 2008

Cambios importantes en el blog

Os quiero informar a los que me habéis seguido hasta ahora, y a los que habéis llegado recientemente, que a partir de este momento, en este blog solo se van a escribir los Cuentos Olvidados.

Un beso

Abril

viernes, 13 de junio de 2008

Gracias Brenda

Alguien más se ha querido implicar en la vida y las inquietudes de Abril, hay alguien más a quien quiero agradecer que se cruzara en mí camino:

http://adopcionpordentro.blogspot.com/2008/06/nuevas-voces-nuevas-perspectivas.html

un beso des de mi reconstrucción Brenda

pd. y aprovecho para agradecer al resto todo vuestro apoyo, quizá no he dicho lo mucho que representa para mi, lo mucho que ayuda teneros aquí.

martes, 10 de junio de 2008

Antecedentes y Consecuentes


Por su afán de querer ayudar, por sus ganas de ser aceptada. Por querer ser más querida que el propio querer, no supo poner sus límites. Y lo pagó. Lo pagó con ella misma.

Por ser vulnerable, por ser frágil, por querer ser perfecta para alguien, quien fuera, cambiando el destinatario, se perdió. Se perdió en ella misma.

Por no aceptar honestamente lo que era, y querer ser lo que en realidad no era, se confundió y se equivocó. Se equivocó con ella misma.

Por no querer sentir más dolor, dolor de rechazo, dolor de vacío, se vació. Se vació de sí misma.

Por querer salir del mismo círculo en el que sola se metió. Círculo de traición y mentira. Círculo de amor y rencor, de esperanza y decepción. Círculo de desmedido dolor. Se agotó. Se cansó de su propia vida.

Por querer autenticidad, recuperar lo que había sido, conocer y asumir lo que no, y aprender de lo vivido, se fue….....Y nunca se supo si volvió.

lunes, 9 de junio de 2008

Querido espejo:

Esta vez me he ido lejos. A un lugar dónde los soles salen a pares, la protección es incondicional, y la paz te llena por dentro. Sí, me he ido. Estoy lejos. Pero cuanto más lejos me voy, más cerca y dentro te siento.


Siempre me regalas momentos para todos los gustos. Pero, des de ya hace tiempo, siempre te encuentro. Me gusta recordarte, comprenderte, quererte y perdonarte. No es fácil, ya lo sabes. No se debe forzar. Con tranquilidad. Seguimos el camino marcado.

Todo lo que no es real es efímero, se esfuma con el tiempo, ese mismo lo pone en su lugar, el de siempre. Aún estando lejos, sabes que es así. Lo que es real permanece, a veces queda camuflado por nubes espesas, pero resurge, en el fondo siempre está. Esta vez lo he comprobado.

Sé, mi querido espejo, que estás. Sé que me ayudarás a conseguirlo. Sé que dentro de un tiempo, todo esto quedará atrás.

jueves, 5 de junio de 2008

Deberes


-mamá, hoy he ido al cole con los deberes sin hacer...


-¿cómo? ¿y eso por qué?


-porqué la vida a veces se pone pesadita y me ha puesto unos más urgentes.





Retorno

vuelven las noches de sueños viciados



vuelven las madrugadas de sudores fríos



vuleven las miradas en espejos rotos



vuelven los ojos agresivos

miércoles, 4 de junio de 2008

Lo he entendido


Hoy vuelvo a sentarme aquí, junto a ti, en nuestra intimidad. Tenemos que volver a hablar. Sé que me fui durante unos días, te avisé, te lo dije y te lo escribí. Necesitaba recuperar fuerzas. También sé que después he vuelto, pero mi mente ha estado ausente. Mucho tiempo. Puede que en realidad solo te haya dejado un cuerpo inerte durante un año. Demasiadas cosas en mi cabeza. Parece ser que quieres hacérmelo pagar, estás enfadado conmigo, o simplemente quieres llamar la atención. Necesitas que te haga caso, y es tu forma de decir que ya te toca. Seguramente tienes razón. Ya he vuelto. Estoy aquí. Mírame y lo verás. Volveremos a crecer. Pero sólo te pido un poco de comprensión. No vuelvas a darme estos sustos. No tantos y tan seguidos. No aprietes tanto. Nunca te he fallado. Realmente tengo ganas de estar aquí, pero estoy (estamos) cansada (s). Basta de ahogar. Lo he entendido, quizá no a la primera, pero ya sí. Tengo ganas de ver esas caras nuevas, y también las que simplemente vuelven a “su hogar”, hay algunas que repetirán. Quiero verte brillar una vez más. Vas a tener cambios, espero que estés preparado.
Mi orgullo, perdona mis despistes, volveremos a volar.

martes, 3 de junio de 2008

Recuerdos del tiempo

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Esperaré a que vuelva ese sol ardiente, al que dejaré acariciar mi cuerpo, con sus dedos de seda, humedeciendo a su paso cada poro de mi piel.
Esperaré a que pasen los días sin un solo llanto, porqué vendrá. Sé que así será.
Y recordará el paseo que hay entre la ternura y la pasión, el deseo y el ahogo de un adiós.
No será un adiós, simplemente su maleta exploradora aún no quiere, no puede, descansar.
Me esconderé entre la arena mientras no está...
Jugaré con mis dedos, fingiendo no conocerlos.
Y volveré a esperar a ese sol cálido, que cada día me ayudará a despertar.

lunes, 2 de junio de 2008

Sures


¿lo he aprendido ya?

jueves, 29 de mayo de 2008

Causalidades



Sentada en un sofá, se hallaba Abril, con las piernas cruzadas. En su regazo, su portátil, su compañero de nuevas búsquedas, de apoyos. De fondo unos violines sosegados, la incitaban sin darse cuenta, a indagar en las nuevas tecnologías. Se puso a buscar información, cuando saltando de página en página se vio seducida por unas palabras, por una cabecera, por un sentimiento, por otro (entre miles) blog: “Adopción por dentro”. Sabéis que Abril no cree en el destino, ni tampoco en las casualidades, pero sí, siempre, en las causalidades. Y esta vez se había sentido abducida, en medio de su vida últimamente dispersa, en estas palabras.


Empezó a rastrear todo lo que pudo de este sitio de forma desordenada, como si se le acabara el tiempo en los siguientes minutos. Deseaba sumergirse y calarse hasta los huesos de lo que veía. Mientras, en su cabeza, resonaba una frase -Debes escribirle algo a quien haya creado esto- Se dirigió a su bandeja de esperanzas y abrió un nuevo correo -¿Y ahora que escribo? ¿Le cuento mi vida? ¿Qué quiero conocerla?- Y sin pensar mucho más, dejó a sus dedos mandar, y salió lo que salió. A partir de ese instante Abril supo, confirmado por un seguido de intercambio de palabras, que ese encuentro era el principio de alguna razón, todavía, desconocido.


Las cosas que nos suceden, el mínimo detalle, sucede por algo...y Abril siempre quiere averiguar el final.

lunes, 26 de mayo de 2008

¿Cuándo?


Ni antes ni después....
justo en el momento adecuado.

sábado, 24 de mayo de 2008

¿Dónde?

Los débiles pueden parecer fuertes, y los fuertes parecer débiles. No te dejes engañar.
Ni arriba para saltar al vacío, ni abajo para dejarse pisar.
Enmedio simplemente para caminar, subir montañas, bajar al mar,
agarrarse en las curvas, tropezar con piedras, y puede que algún día (o no) llegar.

....ya lo ves...

martes, 20 de mayo de 2008

Tu firma

Hace días recibí un comentario anónimo, o eso creía el que lo escribió, incluso pensó que podía llegar a confundirme, pero al final TODO se sabe, ten cuidado. Como no tengo nada que esconder, aquí está, tal cuál:

"si lo que intuyo, es verdad...si lo que se es verdad...la decepción y el rechazo es el mejor de mis deseos... es tu naturaleza, y no me equivoqué...lo llevas en la sangre"

Me alegro de que lo hayas escrito,
me alegro de haberlo leído,
es un detalle más de los que ya iba viendo o de los que ya sé,
y el resumen es que esto, como en la grafología, es tu firma: de ahí se sabe cómo es uno.

gracias

sábado, 10 de mayo de 2008

Déjame hacerlo


Déjame renacer con lo que ya sé,
vivir eternamente en primavera y cerca del mar.

Cuéntame un cuento de bosques encantados,
castillos y hadas.
Un cuento de rosas, deseos y almohadas.
Recítame versos de corazones hechizados,
Versos de almas oscuras, atormentadas,
por fin, liberadas.

Consiénteme dormir con tu olor a sal,
escuchando a lo lejos el romper de las olas,
soñar juntos en días estrellados,
pisar la hierba mojada,
y contarnos los caprichos de las noches soleadas.

Permíteme revivir con lo aprendido,
pasear cogidos de la mano,
por la arena y el mar....
.....o por ese largo y llano camino.

viernes, 9 de mayo de 2008

Instantes previos

Sigue pasando el tiempo, y aunque llueva hoy, Abril quiere avanzar. No es un día triste, a pesar de que la lluvia siempre se lo ha parecido un poco. Es un día sosegado. Es hora de coger el teléfono y volver a llamar a la hermana de los milagros. Antes pero, se toma su tiempo para pensar en estos momentos. Le gusta reflexionar tranquilamente sobre toda la búsqueda, la gente que la apoya, el porqué de esa necesidad, de ese vacío. Le gusta saber lo que va aprendiendo de sí misma, lo que va aceptando, y todo lo que la aproxima a su madre desconocida. De momento ha descubierto a quien le gustaría tener a su lado en esto. A veces tiene la sensación que se acelera y necesita poner el freno de mano a su motor, para poder asumir cada información. Otras en cambio, siente que el motor se ha parado, no oye ni su ruido, ni siquiera está caliente. Hoy, mientras sigue lloviendo, lo va a volver a encender.
Solo de pensar en volver a ponerlo en marcha, el corazón de Abril se encoje, se emociona, tiemblan sus manos, sus ojos se humedecen, y necesita agarrarse a algo que se deje apretar. Coge la almohada que está más cerca, y sentada en ese sofá con sus piernas cruzadas, la abraza fuerte con todo su cuerpo. Esconde su cara en el oportuno cojín. Son solo unos instantes, sabe que mañana pasará. Pero todo tiene que seguir, caminar, avanzar…algún sitio llegará. Todo esto pasa, simplemente, por saber que después llamará. Se incorpora, coge aire, mira su móvil, sonríe… y llama. Como siempre, la fantasmagórica hermana…no está.

jueves, 8 de mayo de 2008

Elijo la luz



Es de noche y me encuentro medio dormida en esa cama grande, vacía. Doy vueltas de un lado a otro intentando conseguir entrar en ese placentero sueño profundo y reparador. Abro un poco mis ojos para situarme, y me doy cuenta de dónde estoy. Esta no es mi casa, no es mi cama, no es mi sitio, pero me reconozco en estas paredes por su calidez. No hay mejor sitio que aquel en el que la puerta se abre de par en par al llegar. Eso me hace observar esta, mi nueva habitación, pero creo que sigo medio dormida porqué veo algo extraño en un rincón.
Hay varias puertas, y una escalera de donde sale una luz q me alumbra. Miro a mí alrededor. Veo las puertas cerradas, alguna aún entreabierta, pero solo hay una que me llama la atención. Es la puerta situada al final de la escalera, totalmente abierta, por donde asoma ese resplandor. Es eso precisamente lo que me indica que tengo que levantarme de esa cama. Quizás sea solo curiosidad, pero algo me dice que no. Esa es mi puerta, hay algo en su camino, algo en su interior. Subo despacio la escalera, con prudencia y con respeto. Pero elijo sin dudarlo esa opción. La puerta está abierta y la luz me ciega el horizonte. No alcanzo a ver lo que sigue detrás, pero eso no importa, la luz es cálida, y me lleva por suelo firme hasta algún lugar. En ese caminar mis piernas se encuentran con algo. Parece un mueble bajo, o quizá un escalón. Decido agacharme y con mis manos jugar a adivinar. Voy acariciando primero con los dedos, para después pasar toda mi mano, una silueta cuadrada, vieja, de madera, con una tapa, que gruñe al intentar levantarla como si hubiera estado mucho tiempo cerrada al exterior. Solo hay un papel veterano dentro, con una simple inscripción:

"Tienes en tus manos tus ilusiones olvidadas en un baúl de un viejo desván”

Me quedo pensando si ese papel me esperaba, si realmente alguien lo dejó para mí. Cuesta creer que sea así. Esta casa no es la mía, ni reconozco el baúl. Aún así decido guardarlo en el bolsillo, y si mañana despierto con él, será que no lo he soñado, será que.....si sigue aquí..... quizá si es para mí.

martes, 6 de mayo de 2008

En las próximas esquinas

A por ella.....

......que ya va siendo hora!!!

lunes, 5 de mayo de 2008

Perseguida




Hace ya algún tiempo que observa que la persiguen. Alguien le va detrás al mismo ritmo de sus pasos. Por las noches oye un eco de su caminar. Últimamente esos pasos se acercan más, siente como si le fueran a pisar los talones. Sale tarde de trabajar. Le asusta saberse observada tan de cerca. Empieza a acelerar su paso, a ritmo seguido. No puede pararse, alguien le va detrás. Busca entre las calles luz o gente que la pueda acompañar en estos momentos, pero no tiene mucha suerte. Sigue mirando atrás. Tampoco sabe si quiere ver quién hay pegado a ella, o prefiere mirar delante, seguro que llegará a alguna parte. Se mete en un portal. Enseguida se da cuenta de que no es muy buena idea propinarse una propia emboscada, entre su perseguidor y una puerta seguramente cerrada. Busca un escondite y se regala una trampa. No hay salida. Se para unos instantes y se aguanta la respiración. “Rápido, piensa” se dice. No logra pensar, solo actuar. Se da la vuelta, dispuesta a enfrentarse con quien sea. Ese debe ser su destino o su final, no hay más. Solo percibe un humo oscuro. No hay nadie más. Esa nube negra se mueve a su compás. Ahora se da cuenta. Es su propia sombra, codiciándola por su fragilidad, lleva tiempo que la quiere atrapar.

lunes, 28 de abril de 2008

Sueños enfurecidos

Hay una guerra empezada en las noches oscuras.
Cada día cuando se levanta, se encuentra agotada,
de la batalla en sueños librada.
No hay ganador ni perdedor, solo víctima y verdugo.
S
angre, castigos, pistolas, golpes y espadas.
Cuidar de una almohada solitaria,

va a ser un buen castigo.
Tiene un ángel a su derecha,

y a la izquierda un demonio enfurecido.
Día gris. Y el sol que se empeña en salir.
Teme mirar atrás, no quiere.
Hay una cama ensangrentada.
Fija su ausente mirada solo en su porvenir.


¿No es eso lo que querías?

Pues ya puedes sonreír con tu malvada mirada.

jueves, 24 de abril de 2008

Estar


Me escuchas siempre y sin juzgar.
Me respetas sin presionar.
Confías en lo que hago, me das seguridad, y sin preguntar.
Dejas que me equivoque, que elija mi camino.
Si fallo, no me corriges, lo hacemos entre los dos.
Me cuidas, me proteges, sin condición.
Me enseñas a luchar, a convivir y a compartir.
Me enseñas la igualdad.
Esto es estar.